El diputado de Juntos por el Cambio Fernando Iglesias atacó este martes a su par del Frente de Izquierda, Myriam Bregman. Con datos poco precisos y banalizando la muerte de Santiago Maldonado, el opositor la cuestionó por mencionar en la sesión de este martes el aniversario de la desaparición del joven artesano y no hacer alusión al caso de Julio López, aunque reparó en que la legisladora fue la abogada del testigo, desaparecido en 2006.
“Che, Myriam Bregman, furgón de cola impresentable del peronismo, por qué en vez de reclamar por la desaparición de Santiago Maldonado, que apareció, no pedís por Julio López y Marcela López, que desaparecieron bajo gobiernos peronistas y nunca aparecieron? Sinvergüenza”, lanzó, con un tono más violento que irónico o cómico, Iglesias en sus redes sociales.
El mensaje de Iglesias, un personaje más conocido por sus exabruptos en redes sociales y canales de televisión que por su labor parlamentaria, fue luego de que Bregman se presentara a la sesión con un cartel reclamando Justicia por el caso Maldonado.
Sin embargo, la propia Bregman le hizo notar un gran error en su acusación: “Me manda a reclamar por Julio López. Locomotora de la ignorancia sobre la lucha por los derechos humanos. No tiene por qué saber todo che. No tendría tiempo para agredir si investiga”.
¿Qué se olvidó Iglesias al enviar su tweet? Que la diputada de izquierda era una de las abogadas del propio Julio López en el juicio por delitos de lesa humanidad por el cual finalmente fue condenado a perpetua el represor Miguel Etchecolatz. En medio de aquel proceso judicial, en 2006, López fue desaparecido.
Ante el error y la respuesta, Iglesias redobló la apuesta. Lejos de corregir sus dichos, lanzó: “Vos, Myriam Bregman, fuiste abogada del desaparecido Julio López, pero cuando tuviste que hablar de desapariciones en la Cámara de Diputados te olvidaste de él y te acordaste del no-desaparecido de Santiago Maldonado”.
Y agregó: “Mi pelotudo favorito es el trosko que defiende a la abogada de Julio López que cuando va a la Cámara se olvida de él y nombra como desaparecido a Santiago Maldonado, que nunca desapareció”. Los datos son concretos: Maldonado estuvo desaparecido casi 80 días entre el 1 de agosto de 2017 y el 17 de octubre de ese año y la Justicia aún no logró establecer cómo se produjo su muerte.
La muerte de Maldonado y una causa paralizada
A cinco años de la desaparición de Santiago Maldonado su hermano, Sergio, explicó que la causa está «paralizada hace dos años en la Corte Suprema» a la espera de la designación de un juez que «investigue de verdad» lo que le pasó al joven artesano. Está a la espera de que se investigue como ‘desaparición forzada’ y que se designe otro juez», afirmó en declaraciones a Télam.
Santiago fue hallado sin vida luego de haber estado 78 días desaparecido tras una represión ejecutada en agosto de 2017 en Chubut por agentes de la Gendarmería.
Sin embargo, a la fecha, el expediente «no tiene culpables ni responsables condenados». En este contexto, Sergio comentó que al juez Gustavo “Lleral ya lo recusaron cuatro veces”. Comentó que “no reconstruyó siquiera lo que pasó ese 1° de agosto de 2017”. “Apelamos para que se designe a otro juez, él se agarra de eso para decir ‘no voy a hacer nada hasta que no resuelvan qué van a hacer conmigo, no puedo hacer algo distinto porque yo ya dí mi fallo’”, señaló.
En tanto, en diálogo con Página/12 una testigo protegida de la causa dio detalles de lo ocurrido. Se trata de una profesional civil de Gendarmería, que declaró que en su consultorio varios gendarmes comentaron el operativo del 1º de agosto de 2017 en la Pu Lof de Cushamen, y dijeron que «había un detenido, se referían a él como el ‘hippie’, lo habían detenido en la zona del campo de (Luciano) Benetton».
De acuerdo al relato, la testigo afirmó que al día siguiente el comandante Juan Pablo Escola, jefe del escuadrón 36 de Esquel, Chubut, le pidió que escondiera una caja donde había un arma, celulares y un trapo sucio. Para las fuentes judiciales que hablaron con este diario el testimonio resulta verosímil. Para la familia del joven Maldonado esta declaración «conecta todas las piezas».