Cerca de la medianoche, el cuerpo de bomberos de Orán recibió un llamando alertando sobre el incendio de una vivienda ubicada en calle Alvarado al 1.200, esquina Sebastián Cuenca, de la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán.
Al llegar al lugar, pudieron observar una densa humareda que salía del inmueble. Al ingresar a su interior, hallaron el cuerpo de una persona mayor de edad calcinada y tendida en el piso de una de las habitaciones, a un lado de la cama que había sido consumida por el fuego.
Se trataría un reconocido médico local, de 65 años de edad, quien según las primeras informaciones se habría hallado solo en el lugar.
El foco ígneo fue controlado rápidamente, según consignó El Tribuno. Todavía no se determinó el origen del fuego, del que se informá luego de las pericias, pero efectivos de bomberos especulan que pudo tratarse de un cortocircuito provocado por un artefacto eléctrico, posiblemente una estufa.La casa se encuentra ubicada en el macrocentro de la ciudad norteña.
Alerta
Las muertes por monóxido de carbono y los incendios por diferentes causas ocurridos en la provincia se incrementaron en el último tiempo, sobre todo desde el inicio de la temporada fría. Este tipo de siniestros generan gran preocupación y la necesidad de remarcar las medidas de prevención.
Desde Bomberos de la Policía y Voluntarios advirtieron sobre el uso correcto de aparatos de calefacción y los cuidados que debe tener en cuenta la gente para evitar intoxicaciones e incendios.
El jefe de la División Bomberos Centro de la Policía de Salta, Mario Zacarías, explicó que la mayoría de los incendios registrados tienen que ver con descuidos domésticos. «Hemos tenido contingencias de carácter eléctrico, como lo ocurrido en la galería de Salta. Por otra parte, tuvimos que lamentar las víctimas de Lumbreras por monóxido. En capital, por suerte no hubo este tipo de casos fatales hasta el momento», señaló.
Recomendó ante la llegada del frío, «hacer un control previo de los equipos de calefacción, ya sean a gas o eléctricos, antes de volver a usarlos. Es importante la supervisión de un gasista o electricista matriculado para inspeccionar los aparatos, las instalaciones y verificar que estén en buenas condiciones».
Los ductos de extracción de los gases hacia el exterior no deben estar obstruidos. En el caso de los artefactos eléctricos hay que tener en cuenta que consumen mucha energía y si la instalación no es buena, se puede generar un sobrecalentamiento riesgoso de las líneas de corriente y un cortocircuito, causal de incendio.
Más del 90% de los incendios en viviendas son por contingencias eléctricas, recalcó Zacarías. Añadió que se debe supervisar frecuentemente los aparatos encendidos. «No se debe encenderlo y acostarse a dormir o retirarse del lugar prolongadamente. Puede haber una fuga de gas, generación de monóxido, entonces la persona lo empieza a respirar, ingresa a su torrente sanguíneo y lo primero que produce es somnolencia, dolor de cabeza, náuseas, hasta un desmayo y muerte».
Por su parte, el jefe del cuerpo de bomberos voluntarios Martín Miguel de Gemes, Walter Chávez, indicó que cada incendio es diferente uno del otro y que las causas pueden ser variadas pero en la mayoría existe un común denominador: las instalaciones eléctricas defectuosas con protección térmica mal calculada. «Este es el caso de los caloventores y estufas a cuarzo. Cuando la protección térmica está mal calculada y hay un sobrecalentamiento, no se cortará la energía sino que se seguirá levantando temperatura hasta generarse un incendio», puntualizó.