¿Cómo se encuentran en este momento, tras casi dos años difíciles por la pandemia?
El mercado de las aguas y las gaseosas no estuvo ajeno al efecto pandemia por lo que afectó al consumo. En un primer momento de 2020 tuvimos una etapa difícil, pero lo bueno fue que pudimos seguir trabajando y produciendo porque fabricamos un producto alimenticio. En esa dura etapa el consumo de aguas y sodas se mantuvo, pero las ventas de gaseosas estuvo muy castigada. Recién en el verano pasado las ventas comenzaron a recuperarse aunque los precios que tenemos no tienen rentabilidad porque competimos con empresas grandes. Entonces estamos subsistiendo en un contexto de alta inflación, mucha recesión y con bajas ventas.
Es que Marinaro compite con firmas de capitales trasnacionales…
Y nosotros somos una pyme salteña que sufrimos los embates de las grandes empresas. Pero lo mismo damos pelea porque somos salteños y defendemos lo nuestro. Eso es lo que le pedimos a todos los consumidores: que busquen los productos de empresas locales. Tenemos que consumir lo que hace nuestra gente que es lo mejor. Tenemos lácteos, carnes, pollos, cerdos, excelentes vinos y la mejor gastronomía. Somos una provincia que podemos autoabastecernos y es por eso que le digo a nuestros comprovincianos que consuman lo nuestro así como consumimos nuestra música, nuestra cultura y nuestras comidas. Nosotros tenemos a 150 trabajadores registrados. Además tenemos a empresas satélites que transportan y comercializan nuestros productos; ellos son todos salteños y mueven la economía de nuestra provincia.
Con la flexibilización de la cuarentena, ¿cómo ven el mercado salteño a futuro?
Va a seguir siendo difícil porque no es que será un boom de ventas. Sin embargo nosotros apostamos a crecer y a emplear a más gente. Vamos a invertir para sacar nuevos productos en aguas y gaseosas, además vamos al vidrio que es más ecológico por lo que vamos a necesitar emplear más gente. Pero eso tiene un pedido a los gobiernos nacionales y provinciales que son reglas más claras y condiciones de competencia más equitativas porque las empresas que vienen de afuera tienen muchas facilidades tributarias que nosotros que somos locales y que damos trabajo a gente local. Este pedido es porque es muy fuerte la presión tributaria de Nación y de la Provincia. Necesitamos facilidades para dejar atrás esta recesión y para crecer. Uno de esos aspectos es el corset laboral que debemos aflojar un poco para emplear a más trabajadores. Es decir, nosotros tenemos ganas de trabajar, de invertir y crecer; pero si no cambian las condiciones a nivel nacional se nos hará a todos muy lento y difícil.
