El PAMI se encuentra otra vez en la mira. En esta oportunidad los jubilados de Orán marcharon hasta la Sede Central del Pami, frente a la Plaza 9 de Julio, para exigirle a Verónica Molina, respuestas y soluciones urgentes.
“Queremos ser atendidos en las clínicas”, “Queremos farmacias para el departamento Orán”, fueron algunas de las consignas que se leyeron en las pancartas que llevaron los manifestantes que pacíficamente reclamaron en pleno centro salteño.
Para conocer detalles de lo que sufren nuestros jubilados en el norte de la provincia, Agenda/Salta se comunicó hace dos meses con José María Guerrero, quien es integrante del Centro de Jubilados San Joaquín de Hipólito Yrigoyen y al respecto de esta situación expresó: “Queremos hacer saber el sufrimiento que tenemos nosotros los jubilados del departamento de Orán. Ayer marchamos 6 kilómetros y esta es la tercera marcha que hacemos en el año. Espero que la directora Verónica Molina del PAMI esté escuchando, así se entera de esta situación”.
Según lo indicado por Guerrero, en el norte de nuestra provincia hay 15.000 afiliados al PAMI que solo cuentan con una única farmacia, que está ubicada en Orán. Es decir, que los jubilados de Urundel, Santa Rosa, Hipólito Yrigoyen, Pichanal y localidades de alrededores, deben viajar cientos de kilómetros para poder comprar un medicamento y si no lo encuentran, tienen que volver al otro día. A eso hay que sumarle las largas filas que deben hacer los jubilados soportando temperaturas que muchas veces superan los 40 grados de calor.
Todo el problema no termina ahí, ya que Guerrero contó tristemente: “No tenemos acceso a una clínica hace 4 años, lo mismo pasa con las especialidades. Si tenemos que internarnos o ir al médico, tenemos que ir al hospital público. Si vos estás enfermo no hay especialistas y te derivan al hospital. El hospital tiene una guardia con 200 personas tiradas y ahí caemos nosotros. Encima los médicos lo que hacen es elegir entre los más jóvenes y los más viejos, ellos eligen a los más jóvenes, mientras que los viejos que esperan, se mueren”.
Según Guerrero a esta problemática la intentaron hacer llegar a los legisladores de nuestra provincia, pero afirmó que los mismos les piden un sinfín de requisitos para recibirlos. Al respecto, el jubilado expresó totalmente indignado: “Los legisladores que tenemos no están ni enterados del tema. Si querés que te ayuden pretenden que pidas audiencia y que le presentar previo un historial. Es una vergüenza”.