Respaldado por el renovado empuje que le dieron los gobernadores peronistas hace un par de días, el Senado retomará la semana que viene el debate por la ampliación de la Corte Suprema. Su involucramiento en el tema, sin embargo, significará un cambio en la estrategia parlamentaria del oficialismo, ya que el protagonismo pasará ahora a las autoridades provinciales, las cuales promueven una Corte Suprema federal de 25 miembros (uno por cada provincia). Sus propuestas se sumarán al debate legislativo que comenzó hace ya un mes, en el marco del desembarco de Horacio Rosatti al Consejo de la Magistratura, y apuntarán a conseguir el apoyo de los gobernadores radicales que se oponen a la reforma al igual que el resto de Juntos Por el Cambio. Paralelamente, el Senado también se reactivará luego de dos semanas de inactividad con la visita de Juan Manzur –que brindará su primer informe como jefe de Gabinete el 2 de junio– y la puesta en marcha de una agenda de temas de interés para los gobernadores, como la ley de Zonas Cálidas.
«Los gobernadores se quieren llevar puesta a la Corte. Lo de la coparticipación ha enardecido a todos», sostienen desde la bancada oficialista en el Senado a la hora de explicar el reciente involucramiento de los mandatarios peronistas en la discusión por la ampliación del máximo tribunal. En el marco de la disputa judicial por la quita de la suba de la coparticipación que Mauricio Macri le había dado por decreto a la Ciudad de Buenos Aires –ahora en manos de la Corte Suprema–, los gobernadores decidieron sumarse a un debate parlamentario que comenzó a fines de abril. Durante tres semanas, numerosos especialistas pasaron por el plenario de comisiones de Justicia, Asuntos Constitucionales y Asuntos Penales del Senado para opinar sobre los cuatro proyectos presentados –dos de les oficialistas Adolfo Rodríguez Saa y Silvia Sapag, uno del aliado rionegrino Alberto Weretilneck y otro de la riojana que cada vez está más cerca del oficialismo, Clara Vega–, pero no había habido grandes repercusiones. Esto se debía, en parte, al vacío que Juntos por el Cambio le hizo al debate –donde casi ni participó por considerar que era «inoportuno»–, pero también por el desgaste de la interna frentetodista.
La participación de los jefes provinciales no sólo le dará mayor volumen político al debate, sino que también afectará la estrategia oficialista. Y es que si bien la idea original era unificar los proyectos presentados –se hablaba de una Corte de 16 integrantes con paridad de género y federal–, el objetivo del FdT ahora es consensuar con los gobernadores una nueva iniciativa que contemple una composición de 25 magistrados y magistradas, uno por cada provincia. «Es la única forma que salga», explica un senador del FdT que participó de la peña de les senadores en La Rioja la semana pasada, donde se planteó la idea de una Corte de 25 miembros (una idea que también dio Raúl Zaffaroni en la última reunión plenaria). Con esta propuesta, el oficialismo busca hacerse con el compromiso de todas las provincias, incluidas las que hoy están gobernadas por el radicalismo (Jujuy, Corrientes y Mendoza), de modo de poder sortear el bloqueo de JxC que vuelve imposible poder aprobar la reforma luego en la Cámara de Diputados.
A la par del debate de la Corte Suprema, que continuará con reuniones informales con representantes de las provincias, la semana que viene el Senado también contará con la visita de Juan Manzur. El jueves 2 de junio, el jefe de Gabinete brindará su primer informe de gestión desde que asumió a su cargo hace ya ocho meses. La oposición está terminando de pulir con el oficialismo las preguntas que le harán en el recinto –«van a ser miles», bromean desde los despachos de JxC– y se especula que la sesión podría durar entre 7 y 8 horas. Se esperaba también, por otro lado, la visita del secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia, Gustavo Béliz, cuya presencia había sido exigida por un sector del kirchnerismo para que diera respuestas sobre el parate de obras para una nueva central nuclear. La reunión iba a ser la semana que viene pero seguramente se pasará para la siguiente debido a los preparativos por la visita de Manzur, y porque solo participará el bloque del FdT.
La agenda legislativa de la semana que viene también continuará con el tratamiento de algunos proyectos que vienen demandando las provincias. Uno de ellos es el proyecto de «Zonas Cálidas», que no es otra cosa que la contracara de la ley de «Zonas Frías» que se sancionó el año pasado que extendía los subsidios al consumo de gas a varias regiones del país. Con esta nueva iniciativa, varios gobernadores del norte exigen que se extienda el beneficio para el caso del consumo de electricidad en esa región del país, en donde las altas temperaturas obligan a un mayor consumo de energía. Según pudo saber este diario, el objetivo es comenzar a darle tratamiento en la comisión de Minería y Energía a partir de la semana próxima.
Mientras tanto, JxC observa con atención el desarrollo del debate de Boleta Única de Papel en la Cámara de Diputados. La oposición confía en que tiene los números para aprobar la reforma electoral en las próximas semanas y toda la expectativa está puesta en lo que pasará en el Senado, en donde el FdT (que está en contra de la iniciativa) controla la Cámara. Los ojos están puestos en tres senadores oficialistas, Guillermo Snopek, Edgardo Kueider y Carlos Espínola, que han respaldado en el pasado el uso de la boleta única. El espacio que lidera Snopek, incluso, presentará este jueves en la Legislatura de Jujuy, controlada por Gerardo Morales, un proyecto de boleta única.