A través de una declaración que hicieron coincidir con el aniversario del fallecimiento de Evita, el Grupo de Curas en la Opción por los Pobres (COPP), denunció la existencia de una estrategia destinada a provocar “la ruptura del normal funcionamiento de las instituciones de la república” de la que participan políticos, periodistas, medios de comunicación y “jueces venales que no pueden ocultar ya su parcialidad y desinterés por servir al derecho”.
En el documento titulado “Una república sin los pobres en el centro es una ficción”, los sacerdotes católicos que trabajan en medios pobres dicen asistir “azorados” a un “espectáculo inmoral” que tiene por propósito “dirigir la opinión pública a la aceptación e incluso al apoyo de la ruptura del normal funcionamiento de las instituciones de la república”. Y subrayan: “irónicamente quienes lo protagonizan dicen hacerlo en nombre de la misma república”.
En el breve texto los COPP mencionan como responsables a “políticos fracasados en su propia gestión” que ahora se empeñan en ejercer “la política del ‘cuanto peor, mejor’, aún cuando lo ‘peor’ signifique violencia”, a los que se suman “pseudoperiodistas y opinólogos, mentirosos a sabiendas y devenidos en sicólogos, moralistas o lo que haga falta para servir a sus empleadores, llaman explícitamente a provocar la caída de este gobierno elegido por el pueblo”.
Sin referirlo por su nombre se hace mención también a los dichos del exmilitar carapintada Aldo Rico a quien califican de “paradigma de la insubordinación” que “escudado hipócritamente tras la imagen de la Virgen, agita el fantasma de la época más oscura de la historia reciente de nuestro país”.
Lo curas advierten también sobre la acción de “medios de comunicación concentrados y concertados para demoler la esperanza de nuestro pueblo en un futuro mejor”.
Todos ellos, siguen diciendo los sacerdotes, están al “servicio de los detentadores del poder económico, empeñados no sólo en maximizar sus ganancias, sino en hacer fracasar toda medida que permita hacer frente a una crisis económica que se arrastra desde del gobierno cambiemita, agravada por las crisis de la pandemia y de la guerra entre Rusia y Ucrania”, sin perder de vista, –agregan– que ambas crisis ha sido aprovechadas para aumentar el lucro de los más poderosos “a niveles incalculables a costa de las desgracias de los más pobres”.
Se trata, deducen, de “una verdadera sinfonía del mal, orquestada por personajes y organizaciones tan apátridas como el dinero”.
Por ese motivo y en función de su propia vocación, los curas afirman que “no podemos callar nuestra condena moral ante este peligro” que ahondará el sufrimiento de los más pobres. Porque serán precisamente estos quienes, “golpeados por la pobreza que crece sin pausa”, se convertirán en “las primeras víctimas de las políticas que prometen poner en práctica quienes quieren hacerse del poder político”.
El documento también pide que “el gobierno que eligió el pueblo no puede dejarse condicionar, extorsionar o amenazar por quienes no reconocen en realidad otra patria que la riqueza y el poder”.
El texto, en el que se alude expresamente al aniversario del fallecimiento de Eva Perón, finaliza con la afirmación de “es en la búsqueda del bienestar de los más vulnerados de nuestra sociedad donde se mide el verdadero sentido de la democracia y el verdadero patriotismo”.
