Pasaron 17 años desde que en 2005 comenzaron los trabajos de apuntalamiento de la estructura de la antigua casa que perteneció al político, militar y comerciante Juan Galo Leguizamón hasta que finalmente se habilitó el museo anunciado casi dos décadas atrás.
Con la presencia del gobernador Gustavo Sáenz, el viernes últimose inauguró el complejo museológico y cultural Explora Salta que comprende la casa de Leguizamón, que ocupa la esquina de las calles Caseros y Florida, y la ubicada exactamente al lado, la Casa de Arias Rengel, construida en el siglo XVII y que desde 1981 se utiliza para muestras de arte.
Sáenz describió Explora Salta como un complejo que presenta un Museo Interactivo, un Exploratorio Infantil y un Centro de Diseño. Cuenta además con salas de exposición, talleres y salas para presentaciones.
También señaló que los nuevos museos utilizarán lenguajes digitales ampliamente reconocidos por el público joven y adulto, y que es una invitación a partir de la experiencia y del juego.
Uno de los dispositivos está conformado por una cinta narrativa que atraviesa todas las salas invitando a descubrir sectores interactivos digitales, mappings, films, experiencias de luz y sonido, experiencias holofónicas, paneles de descubrimiento y documentales envolventes.
El concepto de usos de las plantas que tenía la casa se respeta en el recorrido del Museo Interactivo: la planta baja plantea contenidos relacionados con la vida urbana y pública de los salteños y salteñas con sus salas “Soy de Salta”, “Salta en Acción” y “Saber Hacer”, mientras que en la planta alta las salas “Nos Juntemos!”, “El Milagro”, “Hay Carpa, hay Fiesta!” y “Construyendo Libertades”, desarrollan temáticas relacionadas a la vivencias interiores y personales de las personas.
Un apartado especial introduce finalmente en el particular comedor de la familia Leguizamón: este espacio emblemático cobra vida a través de un show de luz y sonido.
Los niños y niñas tendrán un lugar especial en el museo ya que podrán jugar a reconocer cultivos en el “mapa de Salta”, organizarlos, comprarlos y venderlos en el “mercado”, preparar recetas locales en una “cocina” y poner la mesa para comer, interiorizando a través del juego la lógica de los alimentos que llegan a casa.
También podrán hacer música en una quena interactiva gigante, jugar con un cardón en escala, auto retratarse como parte de un universo y componer vestuarios mezclando prendas de 4 siglos de historia de la gente de Salta.
El Centro de Diseño habilita 10 Salas entre espacios de exhibición, de presentación y talleres de actividades.
El ministro de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, Matías Cánepa, informó que para realizar esta intervención se invirtió más de un millón de dólares con el programa BID Turismo. “Hoy se muestra en todo su esplendor, exhibiendo su valor arquitectónico, cultural e histórico”, dijo.
En este orden señaló que junto a la restauración del Fuerte Cobos y Finca El Carmen, se avanza en el circuito güemesiano que incluye la casona de la calle Zuviría.
A su turno, la secretaria de Cultura de la provincia, Sabrina Sansone, subrayó que las antiguas casonas “se utilizan como lienzo para hablar de Salta y su gente a lo largo de más de 4 siglos de historia. Una cantidad de ítems de la colección familiar de la casa Leguizamón, preexistente y restaurada, serán exhibidos en un marco de coherencia con la actual propuesta museográfica”.
Casi dos décadas en obra
En 2005 aún gobernaba a la provincia Juan Carlos Romero, fue en ese año, ante el riesgo inminente de colapso, que se debió apuntalar la estructura de la casa de Leguizamón para evitar que se derrumbe.
Recién en 2008, el gobierno provincial, ya con Juan Manuel Urtubey a la cabeza, firmaría un convenio con Nación para hacerse cargo de la vivienda que aún permanecía sostenida solo por el apuntalamiento.
Demorarían 4 años hasta que comiencen los trabajos fuertes para hacer nuevos cimientos y reparar muros. La casa, que se había utilizado durante muchos años para uso comercial, sufrió durante el siglo XX modificaciones que debilitaron su estructura.
Los años que pasaron entre la firma del convenio y el inicio de obra en 2012, el gobierno los utilizó para desalojar progresivamente el inmueble de los negocios que aún permanecían, e inclusive a la cuidadora que vivía en la planta alta del edificio. Esas tareas iniciales de infraestructura demandaron una inversión de $2.300.000.
El 1 de agosto de 2016 se licitó la segunda etapa, que demandaría un gasto de $13.000.000, financiado mediante un crédito que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) le otorgó a la provinica a través de un Programa de Desarrollo Turístico Sustentable.
Esta etapa debía concluir en marzo de 2018 con los arreglos finales de la vivienda, lo que daría paso a la última etapa que consistía en el montaje del museo y la vinculación con el Museo Casa de Arias Rengel. En ese entonces se estimaba que en 2020 ya se podía abrir al público, pero finalmente retrasos en la obra y la pandemia dilataron unos años más esa fecha.
“Será un centro cultural de dos museos unidos, uno de mediados del siglo XVIII otro de principios del XIX. Las muestras permanentes no van a ocupar el 100% del edificio sino que habrá salas destinadas a actividades temporarias”, adelantaba el por entonces subsecretario de Patrimonio Cultural de la provincia, Diego Ashur, al portal La Gaceta de Salta.
La casa de Leguizamón, que participó de la guerra de la independencia, fue construida entre 1808 y 1810, y en 1979 fue declarada Monumento Histórico Nacional.
En 2009, todos los objetos que había en la casa fueron trasladados a la Subsecretaría de Patrimonio Cultural para su restauración. Se trata de alrededor de 1500 piezas, entre muebles y vajilla de diferentes estilos, cuadros, fotografías, que ahora son exhibidas en el museo.
El periplo que recorrió la conversión de la vieja casona pos colonial en un museo demandó17 años de obra y pasaron tres gobernadores, hasta que finalmente pudo concretarse la apertura del complejo, sumando un nuevo atractivo tanto para turistas como para los locales.