El candidato independiente a presidente de Colombia, Rodolfo Hernández, aceptó finalmente participar este jueves en un debate electoral con el aspirante del Pacto Histórico, el izquierdista Gustavo Petro, a pesar de que se celebre gracias al «abuso ilegal» de una tutela y de un fallo judicial que hizo de un derecho una obligación «de corte estalinista».

En una carta enviada a Gustavo Petro, el autoproclamado candidato anticorrupción criticó que el exguerrillero se anticipara a decir que estaba listo para el debate, pero sin precisar «mil detalles que se tienen que prever», algo, dijo, «propio del estilo» de su rival.

«Yo también estoy listo para debatir», dijo ahora Rodolfo Hernández, pese a que en las últimas horas del miércoles había presentado tres objeciones técnicas al fallo, entre ellas que la ley electoral en Colombia dispone que los candidatos no hagan declaraciones una vez que se hayan abierto las urnas, y desde el lunes se está votando en el exterior.

«También tengo un programa de gobierno que ha sido millones de veces difundido por todos los medios de comunicación y redes sociales, algunos de cuyos temas han sido profusamente discutidos y analizados», reprochó el exalcalde de Bucaramanga, quien insistió que respeta y acata el fallo judicial, pero no lo comparte.

«De tal manera que este debate que, vía abuso descarado e inconstitucional e ilegal de una herramienta tan importante como la acción de tutela, montaron sus amanuenses debe hacerse en acatamiento al fallo de los magistrados que mayoritariamente decidieron que un derecho se convirtiera en una obligación de corte estalinista», ha protestado.

El Tribunal Superior de Bogotá falló le martes por la noche a favor de una tutela para que ambos candidatos a la presidencia de Colombia enfrentarán sus programas, después de que Hernández dijera que limitaría sus apariciones a sus redes sociales hasta la fecha de la segunda vuelta, que se celebra este domingo.

En su misiva, Rodolfo Hernández planteó todos los parámetros para realizar el debate: temas, nombres de moderadores, el tiempo de respuesta por cada pregunta (cinco minutos) y lugar: la ciudad de Bucaramanga, de la que él fue alcalde entre 2016 y 2019.

Por su parte, Gustavo Petro afirmó que aunque no las leyó todavía, no tiene problema alguno en aceptar las condiciones de su rival del balotaje de este domingo.

Posteriormente usó su cuenta personal de Twitter para volver a insistir que acepta «que se haga el debate que ordena la justicia» y que «debe ser sin condiciones a la prensa» para «que pregunten lo que quieran».

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