La jueza Carolina Poma Salvadores condenó a un policía por abusar sexualmente de su hija menor de edad. Si bien el hombre se había negado a reconocer legalmente a la pequeña, mantenía contacto estrecho con ella
Una madre denunció a su ex pareja por vulnerar la integridad sexual de la hija que tienen en común. Aparentemente el salteño la pasaba a buscar para ir a pasear o tomar un helado, todo con el objetivo de afianzar los lazos parentales.
Sin embargo, esto no era así. El policía abusaba de la niña en los momentos en los que estaban juntos. La tenía amenazada con no revelar nada desde el año 2018. La madre se percató de lo que estaba sucediendo tras leer unos extraños mensajes de texto.
Es así que decide denunciar al policía por el delito de abuso sexual cometido durante el año 2018 y 2019. Enseguida se llevó a cabo una intensa investigación que constató el caso de abuso, pero no pudo determinar científicamente el vínculo parental.
Aún así no se desestimó el agravante de la guarda, ya que se demostró que el hombre de 40 años salía con la menor en carácter de “padre”. Pese a no reconocerla legalmente, mantenía relación familiar con la menor. Por ese motivo se lo condenó por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda y corrupción de menores.
La jueza determinó que el policía deberá pasar 15 años en prisión por sus delitos. Asimismo, dispuso que el CIF extrajera material genético del acusado para su correspondiente incorporación al Banco de Datos Genéticos.