Las lluvias apaciguaron las llamas que avanzan sobre las laderas de El Puyil y El Manzano desde el sábado a la tarde. El sector de incendios sobre alrededor de 15 kilómetros en medio de altas cumbres y quebradas.

La zona está a unos 20 kilómetros de Rosario de Lerma. Sobre los cerros hay varios puestos de lugareños que tienen decenas de ganado vacuno y caprino, que por estas horas buscan a sus animales en medio de extensos cerros.

Manolo Copa, maestro de la escuela de Cerro Negro de Tirao, a unos 4 mil metros de altura, advirtió que las llamas del Manzano estaban subiendo hacia el sector de Tirao, donde son numerosos los puestos y las casas de los vecinos que residen por estos lados tan recónditos de la geografía del Valle de Lerma. «El humo empezó a llegar a Tirao. Los incendios se aprecian de lejos por las noches, con el fuego candente. Los lugareños comenzaron a arrear a sus animales hacia zonas seguras, pero con el viento y la sequedad es impredecible lo que puede llegar a pasar».

Hacia esas cumbres del oeste del Valle de Lerma no pueden acceder los bomberos por falta de equipos y personal. El único destacamento especializado es el de Incendios Forestales de la Policía de Salta, con asiento en Campo Quijano. Pero están trabajando en el norte de la provincia con otros siniestros.

«Solo monitoreamos el fuego con su avance», explicaron desde Defensa Civíl de Quijano a El Tribuno. Las lluvias que estaban anunciadas para este martes llegaron en la tarde. Aplacaron en buena medida parte de estos focos en medio de los cerros. Aunque parte de esta geografía sigue en llamas, y esto preocupa: «Son varios los puesteros que perdieron sus animales entre el sábado y este martes. No sabemos cuántos vacunos y caprinos sucumbieron a las llamas. La lluvia pudo frenar algunos focos de incendios. Las llamas siguen en medio de quebradas donde el viento y los pastos secos avivan al fuego», contó un lugareño que se pudo comunicar por Whatsapp con otros pobladores.

Esta zona tiene numerosas familias que crían animales y poseen campos con sembradíos de subsistencia. La falta de agua y ahora los incendios los dejaron sin recursos para su subsistencia familiar.

El intendente Enrique Martínez, enterado de semejante problema que afrontan los vecinos de los diferentes parajes de esta zona de El Manzano, llevó en persona forraje para los animales y ayuda para los vecinos.

Felisa Valdiviezo, de El Manzano, explicó que la hacienda está pasando un mal momento, sin pastos y sin agua, «somos muchos los pequeños productores que estamos mal con este tiempo de sequía y ahora los incendios que matan a los animales».

Contó la mujer que todos los integrantes de sus familias salieron a campear buscando la hacienda que se está perdiendo con el fuego. Incluso plantaciones de papa y haba se están perdiendo.

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